Pocos nombres de títulos exclusivos en el campo de los videojuegos de conducción significan tanto para tanta gente como Gran Turismo. Una saga monstruosa con millones de copias vendidas a sus espaldas, y que se ha convertido en un sinónimo de calidad en lo jugable y de virtuosismo en lo tecnológico.
¿Qué es Prologue? Un nuevo episodio de las series que, como tal, resulta algo complicado de describir. Llamarlo una “práctica” sería injusto, considerarlo un videojuego completo probablemente también… El juego es, como su propio nombre indica, un prólogo. Una introducción a lo que Polyphony, sus creadores, ansían lograr en la nueva generación con la saga Gran Turismo de cara a su quinta entrega.
Prologue es un notable título de conducción con más virtudes que defectos, no obstante el lanzamiento falla al no ofrecer grandes propuestas jugables a la altura de su apartado gráfico, y al quedar en lo visual como un título deslumbrante pero ligeramente plagado por su habitual falta de personalidad.
La Importancia de Llamarse Gran Turismo
Convenientemente presentado para quienes hayan estado al margen de lo que es Prologue, toca el turno de describir su apartado jugable y sus modificaciones de control y manejo.
Respondiendo a una creciente línea de simulación en el género de la velocidad, donde cada día más se olvida a los amantes del arcade puro y duro, Prologue sigue la cadencia de las series de apostar cada vez más por un comportamiento realista de los vehículos y una respuesta adecuada de éstos. Esto, por otra parte, no tiene el enfermizo nivel de simulación de, por ejemplo, un Forza Motorsport, pero la línea que se sigue es la de ser un adecuado puente entre el hiperrealismo de unos y el desenfadado arcade de otros.
En Prologue cada coche oferta unas capacidades y unas características de manejo totalmente diferentes, fundamentalmente debido a la respuesta del vehículo, a su capacidad de viraje, al peso de la máquina o a la tracción y suspensión de sus ejes. Si no estamos de acuerdo con las prestaciones que ofrece uno de los vehículos recién adquiridos podemos proceder a mejorarlo y modificarlo. Control del peso, tracción, neumáticos o aerodinamismo son algunas de las alternativas que podemos pormenorizar en este aspecto. Las posibilidades que ofrece Prologue en este sentido no están a la altura de las de otros grandes de la conducción, pero de nuevo debemos encomendarnos a su condición de juego “introductorio” para justificar un apartado que es adecuado pero no memorable.